En un contexto donde la incertidumbre persiste y los riesgos son continuos, los pacientes con factores de riesgo, como la edad avanzada o inmunodeficiencias, siguen siendo vulnerables ante el Covid-19. Por esta razón, es esencial contar con tratamientos efectivos y seguros que eviten la progresión de la infección, la aparición de problemas de salud más graves o el empeoramiento de comorbilidades. Así lo subraya un grupo de expertos que participó en la segunda edición del Campus COVID-19, en colaboración con la compañía Gilead Sciences.
El doctor José Luis Piñana, del Hospital Clínico Universitario de Valencia y co-coordinador del evento, enfatiza la importancia de mantenerse actualizados en el tratamiento del Covid-19, especialmente para aquellos pacientes con mayor vulnerabilidad debido a comorbilidades o inmunosupresión. Además, destaca que, aunque la gravedad de la infección ha disminuido, todavía existen pacientes en riesgo que requieren un enfoque diferente al de las etapas iniciales de la pandemia.
Los datos demuestran que, desde la implementación de la vacunación masiva y la aparición de la variante Ómicron, la mortalidad ha disminuido significativamente. Sin embargo, el SARS-CoV-2 sigue circulando, y la atención médica adecuada sigue siendo esencial. La disponibilidad de fármacos antivirales ha sido fundamental, ya que no se ven afectados por las mutaciones del virus, a diferencia de algunas vacunas y anticuerpos monoclonales.
El doctor Miguel Salavert, del Hospital Universitario y Politécnico La Fe en Valencia y co-coordinador del evento, destaca tres objetivos clave: no subestimar la enfermedad, actuar de manera temprana y centrar los esfuerzos en los pacientes más vulnerables con comorbilidades o inmunocompromiso grave. Los expertos coinciden en que el Covid-19 sigue siendo un problema importante de salud debido a la persistencia del virus y su capacidad para generar nuevas variantes.
La detección temprana y el tratamiento precoz son esenciales para reducir la mortalidad y prevenir la aparición del Covid-19 persistente en grupos de alto riesgo. A pesar de los avances en la vacunación, se reconoce que las vacunas no son completamente eficaces en pacientes frágiles o inmunocomprometidos. Por lo tanto, se subraya la importancia de emplear tratamientos antivirales efectivos en estos casos para mejorar el pronóstico y prevenir complicaciones graves y discapacitantes.
El entorno del Covid-19 es dinámico y en constante cambio, lo que hace esencial la actualización continua y la colaboración en la investigación y desarrollo de nuevos tratamientos y estrategias. Además, se enfatiza la necesidad de educación médica continua y foros de discusión entre investigadores para abordar eficazmente esta enfermedad en evolución constante.
